Sunday, January 5, 2020

Cuando mi entrenamiento en artes marciales rusas toca a la puerta.

        Cuando era mas pequeño, el miedo a veces me paralizaba. Podía ser a la hora que me tocara regresar desde las islas que había en la playa del restaurante El Pelicano hacia el muelle; temía a los tiburones. Podía ser al ser interpelado por un bravucón. Temía a las alturas, también. 

            Ya mas grande, los miedos pueden ser diferentes. Puede ser nerviosismo frente a una persona me gusta o mas poderosa. Algunos, como al de resbalarme desde las alturas, permanecen intactos. El otro día me toco gabearme una verja para entrar a mi edificio. ¿qué tiene que ver esto con aquello?

            Pues cuando llegue a la cima de la verja, me toco hacer una maniobra delicada. Me pasaron mil ideas por la mente. Sentí miedo de caer. Estaba muy incomodo. Un paso en falso y pude haberme roto una pierna. Ahí use algo que había aprendido en el pasado. 

            Sucede que desde el año 2012-2013, empezó a intrigarme e inspirarme el potencial humano. Vi algunas actividades en las cuales podía embarcarme: alpinismo, yoga y pranayama. Una de ellas fue Krav Maga. Pasaron los años y en el 2017 decidi probar las artes marciales. 

            Había leído un articulo con ideas para la superación. Era de una subcultura política en especifico. Dicha subcultura valora mucho la estética y la fuerza. Dicho articulo exhortaba a aprender a infligir y recibir violencia para la defensa. 

            Ese fue el punto que mas llamo mi atención. De hecho, es el único que recuerdo de la lista de diez puntos. Los mensajes de superación de dicha subcultura siempre movido desde lo mas hondo. Empecé a investigar en que quería invertir mi tiempo. 

            Sopese los pros y los contras de las dos que encontré. Una fue, vale la pena repetir, Krav Maga. La otra se llama el Systema. 

            El Systema era practicado por los guardaespaldas de José Stalin. Opte por esa. 

            Uno de los pilares del Systema es la respiración: como mantener la calma en los momentos de tensión. Participe en varios simulacros de situaciones de tensión en la clase. Mi profesor siempre me exhortaba a mantener la calma. Incluso si me apuntaban con una pistola a la cabeza. O, mejor dicho, sobre todo si me apuntaban con una pistola a la cabeza.

            Yo, cuando siento miedo, involuntariamente dejo de respirar. Es curioso como la respiración a veces es voluntaria y a veces es involuntaria en el transcurso del día a día. Los occidentales tendemos a aguantar la respiración bajo los momentos de tensión. Deberíamos hacer todo lo contrario. 

            Cuando estaba a mitad de camino del escalamiento de la verja, daba lo mismo y era igualmente riesgoso el devolverme que el continuar. De inmediato, empecé a enfocarme en mi respiración. Mi cabeza se me había puesto caliente. De inmediato se me calmo. Pude diseñar una estrategia. Ahí radica la importancia del deporte. 

            Continuaré mis estudios del Systema este año. Sospecho que me conviene. Después de todo, todavía no he hecho el ejercicio de tirarse a la piscina con una funda en la cabeza. Démosle cabida a 1 Cor 16:13 Manténganse alerta; permanezcan firmes en la fe; sean valientes y Fuertes

            Hay que forjar el carácter. John Maxwell dijo que “el talento es un regalo mas el carácter una opción”. Bruce Lee dijo que “la sabiduría da poder pero el carácter respeto”. Por ultimo, Albert Einstein dijo que “la debilidad de actitud se convierte en debilidad de carácter”

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