Sunday, August 22, 2021

El oceano y el inconsciente

 Tenía esta idea a medias, ahora la he completado pero se ha hecho más grande. Por lo tanto, aun la tengo a medias. Pero opto por compartirles algunas impresiones que me han cambiado.

Sucede que el dios del océano, Neptuno-Poseidón, entendemos en el psicoanálisis representa al inconsciente. Recordemos que para la psicología profunda los dioses grecorromanos eran mínimo personificaciones de las fuerzas que yacen de manera inconsciente en la psiquis. Ahora bien, me preguntaba qué tenía que ver el océano con el inconsciente. He encontrado algunas respuestas.

¿Qué es el inconsciente? Son los procesos de la mente de los cuales no estamos al tanto. Hay un inconsciente individual, propuesto por Freud. Este consiste, al menos en parte, en las experiencias que nos condicionan de una manera de la cual no estamos al tanto. Son las memorias que han pasado de la luz a la oscuridad, pero que no por ello dejan de influenciarnos. Por ejemplo, todos los comentarios hechos por nuestros padres sobre el dinero tienen un efecto en nuestra actitud frente a esa necesidad de vida.

Jung propone al inconsciente colectivo. Son las memorias de la humanidad con las cuales venimos “de fábrica”. Para nuestra tradición psicológica, que no es ciencia exacta ni pretende serlo aunque no rechazamos que nos informe (eje: la epigenética y la memoria de los genes), vemos que la mitología de culturas tan disímiles como la taína y la griega tienen similitudes chocantes y nos preguntamos si es que hay algo que nos une como humanidad a nivel de la psiquis. Han teorizado también, por ejemplo, que el miedo a las serpientes es innato y eso evidencia ese “compartimento” del psiquis con el cual todos los seres humanos venimos “desde la cuna”.

Ahora bien, al igual que el océano, este “departamento” es bien vasto. Tiene, al igual que el océano, profundidades recónditas inexploradas. Por algo se ha teorizado que los cuerpos de agua representan al inconsciente en los sueños que tenemos y podemos interpretar.

Otra relación obedece a que así como el consciente viene del inconsciente, la vida surge del océano. Sin el consciente, no hay vida individual. Es ahí que está el ego, nuestra noción del yo. De quienes somos. Cuando digo “Soy Mario”, ese sujeto que me viene a mi mente es mi ego: mi noción de quien soy, quien no soy, como soy,  porque soy como soy y quienes son responsables de esto. Me encantaría poder presentar más sobre estos dos puntos, espero hacerlo en el futuro.

Lo tercero obedece al elemento agua cuyo efecto es el disolver. Para disolver todas las cosas, recurrimos al líquido. De manera metafísica, la vuelta al inconsciente requiere de la disolución del yo. De ahí observo la relación entre el inconsciente y porque algo trascendente escoge representar esto con el elemento líquido.

La disolución del yo tiene elementos “positivos” y “negativos”. En su vertiente más bonita, cuando meditamos y hacemos trabajo espiritual como ejercicios de mindfulness disolvemos el ego (que es el yo) un poco. Alcanzamos la conciencia unitaria. Podemos llevar lo que tenemos que llevar de la oscuridad del inconsciente a la luz del consciente. A eso se le ha llamado shadow work. Aquí tienen un material sobre esto:
https://drive.google.com/file/d/0B7AqLVquOC-qT3lmYmVPUGtFNXM/view?resourcekey=0-87bEYIxNC6-nnkNtQznYKQ

En sus vertientes más negativas, entendemos que fenómenos como el uso y abuso de alcohol y otras sustancias embriagantes también pertenecen al dominio del dios del inconsciente. Bebemos alcohol para suavizar el yo. Muchas veces el yo nos duele, y con esto lo anestesiamos. Una cantidad prudente de vino ameniza las fiestas y nos trae conciencia unitaria de facto, así sea de manera inconsciente. Por eso los amigos se abren y se hacen más amigos. Veo algo parecido entre los enamorados, que van paulatinamente recordando que no son seres separados. Van disolviendo el yo. Ahora bien, un mal uso de las sustancias embriagantes intentando disolver el yo que nos duele, tiene consecuencias. ¡Lo malo no es el deseo, sino el medio que empleamos para satisfacerlo! Digo que los mismos anhelos de siempre con malas herramientas empleadas por ignorancia nos llevan a las cárceles, a los hospitales, a la bancarrota y a la muerte.

 Dicen que el fanatismo de cualquier índole es similar al alcoholismo, que es mínimo otro intento de disolver el yo que nos arde. ¿No es el fanatismo un anhelo de pertenecer a algo más grande? Mediante la pertenencia al grupo, el fanatico anestesia la memoria de quien es y el hecho de que no le gusta quien es. Dicho sea de paso, ¡ya pertenecemos a algo más grande! ¿Qué será lo que le ocurre al fanatico? Celebro su anhelo, y en el futuro espero hablar sobre el porqué escoge esa herramienta: la pertenencia a un grupo/causa/idea determinadx. El anhelo, la conciencia unitaria, recordar que todos somos parte de un mismo uno, ¡es bonito y digno de celebrar! Pero las herramientas son un arma de doble filo.

El otro día visité uno de los cenotes del Sendero Padre Nuestro y le comenté a algunas personas una de las cosas que estábamos haciendo: retornando a la madre. Dicen que ese cenote era creído por los taínos de tener propiedades curativas. En algunas tradiciones, se celebraban ritos en la cueva para rememorar y representar de manera simbólica uno de los mitos universales: el retorno a la madre, siendo la cueva una especie de vientre terráqueo. Los héroes lo han hecho en varias tradiciones: Jesús descendió al infierno al igual que Mercurio, y Jonas pasó unos días en el vientre de la ballena como parte de su ministerio heroico. ¿Que tiene que ver esto con la disolución del ego para volver al inconsciente? Bueno, es una vuelta al vientre de la madre porque la vida viene del vientre de la misma manera que el ego -que es la vida- viene del vientre que es el inconsciente.

Agradecimientos y fuentes:

https://kimcheeandcatnip.wordpress.com/2018/09/23/solutio-the-alchemy-of-water/
Pacifica Graduate Institute.
Otras fuentes.

Atabey... - Mitos y Leyendas. Cultura Universal | Facebook

Atabey, la gran madre taina. Atabey fue divinidad de la Luna, el mar, la fertilidad y el nacimiento. ¿Que tiene que ver el mar con el nacimiento, con la madre? Que la vida, el nacimiento, viene del agua. Bien seria buena idea ver el rol de los elementos en el genesis, donde vemos que se trabaja con aire o espiritu (el quinto elemento) y tierra tambien. Recordemos que la Luna y el Oceano tiene un vinculo bien intimo tambien. En el psicoanalisis agrupamos cosas que superficialmente parecen disimiles aunque tras un analisis vemos que son imposible de ser separadas.

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