Hoy es el Día Mundial del Compromiso con la Comunidad y queria aprovechar para tocar el tema que es la responsabilidad del empresario para con su comunidad. Sucede algo y he hablado de esto antes: en un mundo “idilico”, estaria de acuerdo con Milton Friedman en que la única responsabilidad social de las empresas es maximizar las ganancias dentro de los límites legales. Pero, en la práctica, esta vision del capitalismo fundamentalista adolece de las mismas carencias que el comunismo Marxista-Leninista ortodoxo: olvida factores claves como lo complejo de la naturaleza humana y la sociedad.
Por ejemplo, el ideal de Friedman se ve en la práctica truncado por lo que algunos argumentan truncó el ideal sovietico: la corrupción. Lo que digo no es ajeno a la tradición que valora la economia de mercado, en la cual me inscribo, si bien los proponentes de la economia mixta no nos terminamos de poner de acuerdo sobre cuánta regulación estatal es lo optimo: el mismo Adam Smith abogo porque la economia de mercado tenga una fuerte zapata moral a fin de que la riqueza termine enriqueciendo a la sociedad como un todo. Smith hablo de la mano invisible, pero jamas la candidateo para la presidencia ni la propuso como monarca absolutista.
He hablado mucho de la palabra vocacion que si investigamos sus raíces en el latin vemos equivale a llamado. Dicen que antes al sacerdote catolico Dios le susurraba de manera muy real en el oido a alguien que queria que El fuera cura. De ahi que se hable de la vocación sacerdotal. Juan Calvino, protagonista de la Reforma Protestante, propuso el sacerdocio de todos los creyentes a la vez que también propuso dejar ir la noción de que algunos llamados son sacros y otros mundanos, entendiendo que cualquier trabajo/carrera que escojamos es igual de válida a los ojos del dios Cristiano para su proposito.
De ahi que, quizas yo este parcializado por entender mi vocación es politica y no empresarial, sin que ello signifique que no me gusten los negocios. Porque el dominicano es bien comerciante y de hecho tengo entendido que el estado favorece via la legislacion que integrantes del como los diputados tenga incentivos para poder formar PYMES.
Ahora bien, hay otros llamados a ser empresarios y no veo esta vocacion como ni mejor ni peor que la política. ¡Necesitamos de personas que identifiquen vacíos en el mercado, propuestas innovadores en “oceanos azules” y que recauden dinero bien habido para hacer realidad una operación comercial a cambio de una buena tajada (el lucro) que optimamente, si el empresario quiere crecer, será reinvertida a segun entiendo yo en un 70% para seguir creciendo mas como empresario, creando empleos a la vez que le da a su comunidad buenos productos y servicios!
Comprendo que a muchas de estas personas les importa muchisimo su comunidad. Muchos son creyentes. Tenemos, por ejemplo, al empresario catolico que escucha a su iglesia cuando dice que el dinero no es del, sino de Dios, y que él es un mero administrador que debe respetar la dignidad humana, el bien común y la justicia en el ámbito económico. En la otra esquina, está el New Ager que propone que el dinero es una energia que sirve tanto para crear como para destruir y debe escoger de qué lado pararse.
Le doy gracias a Dios por estos empresarios. Me río porque digo que por algo Dios no me dio vocacion de empresario. De hecho, cuando he emprendido, lo que más valoro no es la plata sino lo que aprendo. Si yo fuera empresario, eso de la “responsabilidad social” para mi seria una carga excesiva, el preocuparme por la comunidad encima de todo el estres de maximizar ganancias. Yo entiendo que eso del “preocuparse por la comunidad” se resuelve con dejarse apretar del ente regulador que es el estado ademas de sentarse en la mesa de la negociacion colectiva con el sindicato, y chillar junto a mis colegas de las patronales si hay exceso dentro de, claro, una sociedad donde haya un Estado Social y Democratico de Derecho con el imperio de la ley y seguridad juridica que esto conlleva. Y claro, si tenemos esa convicción, diezmar para que Dios termine de ponerle el ‘Like’ a la billetera.
Y he ahi el problema. Esto es un teorema bien complejo, no es bueno que tengamos una vision simplista y caricaturesca del panorama, pero me atrevo a afirmar que el estado tradicionalmente precede al empresario, pero especialmente con el advenimiento de la figura de lo que hoy conocemos como una Republica (ejemplos serían Francia y Estados Unidos) el estado devenido en estado burgues en vez de estado monarquico absolutista ha sido hecho a imagen y semejanza del empresario y por ende no veo del todo injsutificado afirmar que el estado como lo conocemos hoy sucede al empresario, en vez de antecederlo. Vale la pena señalar que monarquias parlamentarias y republicas, economicamente en la práctica, parecen tener escasas diferencias, si es que hay alguna que valga la pena mencionar. Y esta la republica del tercer mundo que se inserta en el sistema-mundo subordinada (ver Teoria de la Dependencia) a paises mas ricos bajo el liderazgo de un frente oligarquico de naturaleza precapitalista, que bien puede tener capitalistas dentro, pero no en un rol predominante.
De ahi que me gusta distinguir al innovador emprendedor que “guayo la yuca” para conseguir un capital para desarrollar una buena idea de negocios y lo hace lo mejor posible, al accionista institucional que como vampiro desangra al pueblo sin darle nada de valor a cambio dentro del esquema del capitalismo de camarillas en el cual ese “empresario” negocio con “politicos corruptos” para hacer un truco de magia en el cual la sociedad sale perjudicada para que un grupo con fortuna de origen dudoso “sin dar un golpe ni de karate” pueda “pasarsela echandose fresco en la bolsa” con su megayate Lürssen parqueado en St Barts mientras sirvientas rusas traen pan trenzado recien cocido que ellos puedan mojar en Aceite de Oliva Olivie o untarle Pâté de foie gras con vino de Burdeos como maridaje.
Entonces, visto los abusos de las aerolineas privadas, empresas de telecomunicaciones privadas, servicios de delivery de esas nuevas empresas de “capital intangible” como UberEats y PedidosYa, megamineras que usan cianuro, entre otras, veo menester a un pueblo empoderado que apriete vía todos los mecanismos de presión existentes con prudencia y sensatez. Quiero saber que le aportan esas entidades al colectivo.
Ahora, tengo amigos empresarios que con mucha creatividad y etica, ven “las reglas del juego” de su sociedad y lo hacen lo mejor posible. A ellos les doy todo mi respeto, aprecio y les reitero mi sincera amistad desinteresada. Y cuando digo desinteresada, me refiero a solo en el mal sentido porque la buena conversación que me ofrecen para mi vale oro y es muy valiosa. De mas esta decir que los quiero mucho y ellos/as lo saben.
Es a este segundo grupo que apuesto. Muchos le dan a la caridad. No maltratan a sus empleados. Saben, al igual que yo, que no todo el mundo tiene la misma capacidad pero por un motivo u otro valoran la misericordia hacia el más debil sobre la cual teorize en mi escrito que publique sin terminar sobre el pecado estructural.
Creo que a ellos les encantaria poderse preocupar solo por maximizar ganancias, y dejarle la responsabilidad social al estado al cual le tributan siempre y cuando hayan leyes claras y justas que se hagan cumplir de manera imparcial porque, de lo contrario, el empresario que “lo hace bien” tiene una desventaja competitiva, lo cual no es justo.
El estado debe ser el mejor amigo del buen emprendedor y el peor enemigo del rentista abusador. Le temo como el diablo a la cruz a ser el político “fabricante de miseria”. Pero, por ahora, tengo una sola solución: pedir apego voluntario a la ley y negarse a tomarse copas con los que lo están haciendo mal en el Club Social hasta que cambien.
Es cuanto.
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