Wednesday, September 24, 2025

La Mujer y el Liderazgo

  La Mujer y el Liderazgo


    A lo largo de mi vida, me he encontrado con mujeres muy especiales y muy valientes. ¡Maria, Maria, Maria, Heydi, Melissa, Sue, Heather, Teresa, Alexandra, Myrna, Jacqueline, Sonia y Evelyn, entre muchas otras más! Hoy, Día de la Festividad de las Mercedes para el pueblo dominicano, quería recalcar el rol de la mujer y su liderazgo en el plan divino de salvación y en la política con principios, entendiendo que ambos conceptos van de la mano.


    ¿A qué me refiero con el plan divino de salvación? Sin ánimos de ofender porque entiendo alzar el tono a veces es necesario, más el tono correcto a veces amerita algo más “liberal mystic” que “rajatablas a la antiguita”, a mi humirde opinión y forma de ver las cosas, quería definir de una manera inclusiva para los agnósticos eso del “plan divino de salvación” como la noción de que todo obra para bien, a sabiendas que un agnóstico puede plantear duda razonable sobre si este Universo tiene un fin teleológico en primer lugar. 


    Visto eso, se que hay gente que no le gusta la mezcla de política con religión. Y suerte que le meto también pelota vía historia del deporte, psicología deportiva, sociología deportiva, derecho deportivo y biología del acondicionamiento físico para fines de salud cuando pienso, para por lo menos los dominicanos poder decir que “me metí de a mucho”. Pero bueno, creo es menester entrelazar lo sacro con lo mundano, no lo veo profano. 


            Después de todo, pegamos el grito al cielo cuando nuestros dirigentes muestran falta de probidad, y la mayoría de la gente del mundo informa su marco moral con la religión. Y en las sociedades “modernas”, muchos no van a la iglesia a congregarse con regularidad, más buscan de “marcos teóricos” que se informan del pensamiento cristiano, que a su vez se informó de tradiciones que le preceden: en Kant y Marx vemos a Lutero, en los que buscan del derecho podemos encontrar a John Stuart Mills que ha sido descrito como agnóstico y humanista secular, más como yo soy muy creyente, no puedo separar mis convicciones religiosas de los principios que me guían al momento de actuar cuando comento noticias en la Twitter (ahora “X”). 


        Creo que el trabajo diario es valioso y ayuda a crecer como persona, creo que hacer bien las tareas demuestra responsabilidad y compromiso, creo que todo trabajo importa y contribuye al bienestar de la sociedad. Informándome de pensadores cristianos como Jean Calvin y Jose María Escrivá (canon. 2002), creo que el trabajo es un medio mediante el cual Dios obra en nuestros corazones. Creo que la santidad, nuestra virtud, consiste en hacer la voluntad de Dios en la vida cotidiana. El trabajo cotidiano, que incluye el trabajo político para los que buscamos de la política por amor a la misma, es un deber para glorificar a Dios. Todo trabajo tiene dignidad cuando se realiza en obediencia a Dios. Veo al poder del político para “bregar” con las energías colectivas similar a como veo al dinero del comerciante: no como su propiedad sino una propiedad de Dios encomendada a este para su buena custodia y mayordomía (en inglés, stewardship)


        Es por eso que hoy, Miércoles 24 de septiembre del año en curso, día en que se conmemora, en concordancia con nuestra legislación, el Día de Nuestra Señora de las Mercedes, una festividad de relevancia histórica y cultural para la República Dominicana, que forma parte de nuestras tradiciones nacionales, me pareció propicio para tratar el tema de los liderazgos de las mujeres, personas con sexo femenino. 


            Y es un tema algo cargado porque veo confusión. Opiniones encontradas. En ocasiones, ausencia de búsqueda desinteresada de la verdad. Pero, para no meterme en temas tales como la división del trabajo en base a la diferenciación cromosómica, más adelante tocaré ese tema visto que la mayoría de la gente que afirma que no quiere hijos cita “otras prioridades”, “crisis de valores” y “precariedad económica” con muchísima más frecuencia que convicciones antinatalistas, quería recalcar el rol de la mujer allende las fronteras del hogar de la familia nuclear y, al mismo tiempo, recalcar el carácter de género tras dichos liderazgos, habiendo muchos ejemplos trascendentes. 


        Uno que me viene a la mente es la Reina Ester. Ha sido considerada por algunos estudiosos de las cosas de Dios como precursora de la madre de Jesús en el plan divino al cual me referí al principio. Y traigo a colación a la Reina Ester porque hay personas que, con toda la buena intención del mundo, consideran que al momento de sufragar, el hecho de que sea un candidato o una candidata no debería pesar en lo absoluto pues se debe sufragar en base a mérito. Más, en el plan de Dios para con la vida de Ester, vemos algo disímil: Dios no necesitaba una persona para lograr su propósito y escogió a Ester sin considerar su género. Todo lo contrario. Veo la historia y veo que Ester tenía que ser una mujer porque la tarea que Dios necesitaba NO LA PODÍA HACER UN HOMBRE. Tenía que ser una mujer.


        Es por eso que yo me siento totalmente cómodo sosteniendo que ni es lo mismo ni es igual una persona con cromosomas XX y una persona con cromosomas XY. Y, a la misma vez, creo que en democracia, a veces es bueno que sea un hombre y a veces es bueno que sea una mujer. Y claro, por igual, también a veces en todos los ámbitos el sexo biológico no es irrelevante, pero la vacante puede ser “unisex”. Ahora bien, al momento de promover el respeto sano a la diversidad, hay que saber que no es lo mismo una dama y un caballero. Por ejemplo, esto sonará controversial, pero no es lo mismo el “mollerú” con dos tatuajes al lado de la dama que se ve tan bella y frágil como una rosa al momento del commute nocturno si la empresa no ofrece transporte seguro. 


    Es de ahí, que en este Día de Las Mercedes, hago un llamado a celebrar el liderazgo femenino. Vital, pero creo que minimizar o trivializar su identidad y expresión de género en base a sus cromosomas, es errado en muchos casos. Muchas mujeres en la cúspide de las esferas del poder social, político y económico han atribuido su éxito a que, en parte, la experiencia del ser mujer les ha informado su praxis. Que no llegaron a pesar de ser mujeres. Sin denostar los desafíos únicos que enfrentan las personas de sexo femenino, han compartido que vivir mas a plenitud el misterio del ser mujer ha sido vital para el conducir que les ha llevado al éxito que han gozado aquí en la tierra. 


        Sin más que agregar, por este instante. 


Quise incluir esta imagen con el fin pedagógico que es el recordar el vinculo entre la advocación mariana que se conmemora hoy y la abogacía. 


No comments:

Post a Comment